Llevo escrito tu nombre
sobre la piel del olvido,
y no es que no te haya querido
Sino, que tu mundo esta muy lejos del mío.
Amor de horizontes lejos
que encuentro sólo mi desconsuelo,
que se vuelve sobre las huellas
que alguna vez pisaron, sobre mi árido suelo.
El mar, se ha bebido al dulce río,
y yo me quede con la sal,
amarga del llanto mío.
¡Y no es que no te haya querido.!
¡Sino, que tu mundo esta muy lejos del mío.!
Sin ser lo que pude haber sido,
sufro el dolor de la espina
de un amor que se ha ido.
Son cosas de la vida, un error del destino,
somos errantes, de distintos caminos.